jueves, 19 de noviembre de 2009
Poema dedicado a los Domadores
Por los caminos bermejos
avanzan los domadores,
potentes pechos al viento
sobre cuatro redomones.
Huelen a verano y cuero,
mascan tabaco salobre,
hablan su idioma paisano
con sabor a miel y monte.
Se dirigen a la doma,
torneo de astucia y porte,
con los muslos de quebracho
y las muñecas de roble.
El campo, pariendo potros,
les tiende metal de soles
para que graben su hazaña
los viriles domadores.
Curvas de sudor y crines
decoran el horizonte
y el sapukai taja el coro
de relinchos y estertores.
Dos voluntades en pugna,
cuatro cascos en redoble
y un final de espumarajos
para un vencedor de bronce.
En el campo de Corrientes
florecido de varones
graban así sus hazañas
mis paisanos domadores.
domingo, 15 de noviembre de 2009
Imagenes del Recuerdo
En estas fotos Carlos Merlo representando a :
Emiliano Cardozo y su conjunto en el año 1992 en el Recreo el Chaqueñito en la Ciudad de Rosario.
Fito Ledesma y su conjunto en el año 1991 en el Rancho de Ramon Merlo.
El Conjunto de la Simpatia Veron Palacios en el año 1995 en la Escuela 1148 en la ciudad de Villa Gobernador Galvez.
Por ultimo Carlos Merlo presentando a Los Grandes Del Chamame en el Club Olimpico de Villa Gobernador Galvez
jueves, 12 de noviembre de 2009
Homenaje al Campo
A cielo abierto
Mario Roteta Lacarrié
Mi homenaje al campo
Los aromas del campo llevo adentro;
Los fui dejando atrás y los extraño;
Fueron parte de mí por mucho tiempo
Y no los borra el paso de los años.
Al tirarle un anzuelo a los recuerdos
Me veo caminando por las lomas,
En sembrados de sorgo o en maizales
Cazando las intrépidas palomas.
O metido en el barro del estero,
Oculto en pajonales del bañado,
Esperando paciente al cresta rosa
O al picazo, ese premio tan preciado.
Evoco el color de amaneceres
Al asomar el sol de un nuevo día,
Saludado por el canto de las aves
Que desgranan increíbles melodías.
Revivo a cada instante mi contento
Por tantas amistades cultivadas,
En especial la del mencho correntino
Compañero de tantas madrugadas.
Admiro al sencillo hombre de campo
Al que nunca hay que entrarle sin aviso,
Aquel que cuando prueba tu respeto
Ya nunca más te negará permiso.
A cielo abierto detuve mis urgencias
Que en poblados minaban mis entrañas;
La paz del alma no nace con apuros,
Se fragua en el silencio y en la calma.
Campo añorado: vos curaste mis angustias
Y me enseñaste lo que en verdad vale;
Te pido un gran favor: cuando me vaya
Me despida el silbar de tus juncales.
Que vuelen sobre mí las garzas blancas,
Que suiriríes toquen sus violines,
Y junto al canto virginal de los zorzales
Conformen el entorno más sublime.
Que tormentas y vientos no me esquiven,
Que me dé la luz del sol, gran compañero,
Y que Dios me perdone por robarte
La mágica quietud de tus esteros.
El destino nos traza los caminos
Y sobre ellos quedarán mis huellas,
Y aunque las cubra el pasto más crecido
Las estarán cuidando las estrellas.
Mitos y Leyendas:El Curupi
El jesuita José de Anchieta, notable naturalista español llamado “Apóstol de Brasil” por su destacada labor misional en Sao Paulo (ciudad surgida de una misión fundada por el religioso) dice de él: ... El Kurupí o Kurupiré es un demonio menor de los guaraníes. Es un hombre pequeño, de cuero escamoso, de orejas en punta, que tiene la particularidad de tener los pies hacia atrás, es decir, avanza con los talones. Pero su principal rasgo es su miembro viril que da varias vueltas a su cintura y con el cual, desde la distancia puede embarazar a una mujer...
...a veces roba criaturas mejor si son del sexo femenino y otras llega a asesinar al cazador desprevenido que no le deja su caza, comiéndole el corazón...
De esta manera presento el mito fálico de los guaraníes, símbolo de la abundancia, de la multiplicación de la especie. La lujuria es una característica del ser humano, que no entra en celo estacionalmente como los animales, sino que vive permanentemente en actitud de apareamiento. La barrera moral que impone principalmente la iglesia, ha permitido una convivencia de respeto por el sexo opuesto. El hombre moderno se guía con reglas por él impuestas, que acepta y acata, creando una escala de valores muy útil a su vida social.
Nuestro Curupí, tiene su equivalencia en el dios griego de los bosques, los campos y la fertilidad. Este dios europeo, llamado Pan, tenía cuernos, orejas y patas de un macho cabrío, por lo tanto regía la vida de los pastores y cabreros. Su fealdad hacía que las mujeres, especialmente las ninfas (divinidad griega o romana que vivía en las fuentes, los bosques, praderas, ríos y el mar) le escaparan. Pan, conociendo la debilidad que estas deidades tenían por la música y la danza, construyó una flauta de cañas, con la cual las seducía ejecutando melodías incomparables.
En el mundo guaranítico se dice que Curupí tiene el falo tan largo, que lo enrolla en la cintura. Con él puede atraer desde la distancia a las mujeres para embarazarlas. Se lo describe como un hombre joven, velludo, de baja estatura, que deambula desnudo en la siesta por los bosques, buscando muchachas que caminen solitarias, para aplacar su lujuria. Las madres suelen asustar a sus hijas para que no se aventuren solas en la selva. Si se encontraran con Curupí, podrían quedar preñadas, y si consiguen escapar de la tentación que les hace con señas obscenas desde las ramazones, pierden la razón, teniendo a partir de ese momento ataques de epilepsia. Es torpe para desplazarse, por lo tanto se afirma que es muy fácil burlarse de él, y que además, cortándole el falo se vuelve inofensivo.
Ayala Gauna lo describe como un enano cobrizo, robusto, capaz de estrangular con sus poderosas manos, pero con un cuerpo torpe, de una sola pieza (es decir, carente de coyunturas) y los pies dirigidos hacia atrás. Es fácil burlarlo trepándose a un árbol, pues no puede subir. Tampoco puede nadar, o lo hace con mucha dificultad. En esta versión es antropófago, prefiriendo la carne de los niños y las mujeres.
Juan Bautista Ambrosetti lo relaciona con el Yasí Yateré, pues cree que es una variante de aquel, quizá debido a que en sus investigaciones recopiló que gusta secuestrar niños para lamerlos. Otros autores lo describen como guardián del monte, confundiendo su función con la del Pombero. Personalmente creo que es la canalización de la sexualidad exacerbada de los habitantes de lugares apartados o solitarios. De igual, modo los europeos utilizaron la figura del Fauno (romano) Pan (griego) o Sátiro (griego) para entender la tendencia lujuriosa de los hombres.
Curupí fue un recurso nacido con la llegada del cristianismo, donde se mezclaron las rígidas reglas morales de la nueva religión, con los antiguos saberes míticos. Fue utilizado por las madres en el área guaranítica para evitar los hijos de madres solteras, o poner freno a las muchachas ardientes, que de otro modo cargarían con numerosa prole sin padre que se haga cargo de ellos.
miércoles, 11 de noviembre de 2009
Mitos y Leyendas del Chaco:La Caña con Ruda
En toda el área guaranítica, y allí donde esta cultura ha calado en su expansión, con actitud casi religiosa, se cumple el rito de beber “caña con ruda”, todos los 1º de agosto. El preparado, para combatir lo supuestos males que podrían venir con este mes, se elabora días antes, y debe ingerirse como primer alimento del día. En la actualidad se ha “modernizado” en sus componentes. Del licor fabricado con chañar, algarroba, patay o tunas, se pasó a la caña (la más popular es la caña paraguaya) y el lugar de la “contrayerba” (mezcla de hierbas medicinales) ahora es ocupado por la ruda.
Según cronistas de la conquista, en esta época del año (agosto) se producían grandes lluvias, las que, agregando el frío estacional, provocaban enfermedades, algunas epidemiológicas. Muchas aldeas se diezmaban a causas de las pestes. Los nativos encontraron la forma de combatir los males. A través de sus chamanes elaboraron el remedio consistente en mezclar hierbas con licores, del cual debía beberse un trago al comenzar la estación de las lluvias chaqueñas (hablamos del Chaco Gualamba).
El encuentro de culturas, generó la predominancia de la conquistadora que cambió los componentes, llegando a nuestros días tal como se la conoce. Aquel que no compra caña en los comercios, mezcla agua potable con alcohol etílico en proporciones que varía según el gusto, le agrega hojas de ruda maceradas, y se colorea el compuesto con azúcar quemada. Más cerca en el tiempo, los “gringos” le agregan cáscara de naranja al quemar el azúcar. El preparado debe estacionarse varios días, para permitir la conjunción de las sustancias que componen el remedio.
La moderna medicina, aconseja vacunar a los ancianos y a las personas de bajas defensas, al llegar el invierno, para evitar la gripe. Es posible que se hayan operado cambios climáticos importantes, que trasladaron en el tiempo, la práctica cultural.
La imaginería guaranítica le adosó virtudes a los componentes y al compuesto mismo. Desde afirmar que una ramita de ruda colocada debajo de la almohada del cónyuge poco cariñoso, cambia su actitud haciéndolo mimoso, hasta llevar una rama en la oreja para calmar los dolores menstruales. Algunos médicos antiguos han hablado de las virtudes de la ruda para calmar la fiebre producida por picaduras de avispas, hasta ser efectiva para demorar los efectos del veneno inyectado en una mordedura de víbora.
Sin dudas, esta inofensiva práctica, forma parte del folclore guaranítico fuertemente arraigado en el Chaco.
martes, 10 de noviembre de 2009
Fiesta del Reencuentro-26 de Julio
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